miércoles, 21 de octubre de 2009

Las figuras lingüísticas

En el ámbito lingüístico, figura es cada uno de ciertos modos de hablar o escribir con que se trata de destacar de manera especial un mensaje. Con las figuras se buscan, pues, objetivos expresivos o estilísticos, a los fines de captar la atención y hasta lograr la admiración del receptor. Las figuras constituyen un conjunto heterogéneo de construcciones lingüísticas que estimulan la imaginación de todos los usuarios de la lengua, por lo que las mismas tienen valor cognoscitivo. Se manifiestan en los registros discursivos formales e informales y tanto en el habla coloquial como en la culta, y de manera muy especial y abundante en la literatura. Veamos a continuación una gran parte de ellas, con sus definiciones y ejemplos.

Alegoría: consiste en hablar figuradamente; se trata de un procedimiento retórico de amplio alcance compuesto por una sucesión de metáforas.

“Porque esta vida no es
-como probaros espero-,
Mas que un difuso tablero
de complicado ajedrez.
Los cuadros blancos: los días
los cuadros negros: las noches...
Y ante el tablero, el destino
acciona allí con los hombres,
como con piezas que mueven
a su capricho sin orden...
Y uno tras otro al estuche
van. De la nada sin nombre.”
(O. Khayyam)

“Quisiera ser un pez
para tocar mi nariz en tu pecera
y hacer burbujas de amor por donde quiera.
Pasar la noche en vela mojado en ti.
Un pez para bordar de corales tu cintura
y hacer siluetas de amor bajo la luna.
Saciar esta locura mojado en ti.”
(J. L. Guerra)

Aliteración: consiste en repetir reiterativamente una misma agrupación de sonidos para producir ciertos efectos en el oído.

“las cocolas cantan cánticos calientes”
(M. del Cabral)

“lame la luz de ti la lengua libre”
(O. Muñoz)

Anáfora: consiste en repetir palabras o sintagmas al inicio de varios versos o frases.

“Que la vida no vaya más allá de tus brazos.
Que yo pueda caber con mi verso en tus brazos,
que tus brazos me ciñan entera y temblorosa
sin que afuera se queden ni mi sol ni mi sombra.”
(D. M. Loynaz)

“días para perder amigos
días para chocar de cabeza contra el techo
días para dibujar a dios en una lágrima
días que crujen o son espejos vacíos”
(O. Muñoz)

Antítesis: consiste en contraponer dos frases o ideas en virtud de sus sentidos opuestos.

“El camino de la cosas buenas está lleno de luz. El camino de las cosas malas es oscuro.”
(J. Rulfo)

“El temperamento clásico es sereno, y el romántico es inquieto; aquél busca la armonía y éste la lucha; aquél busca el alma de la naturaleza difundiéndose en ella, y éste pretende arrancarle sus secretos desgarrándole las inagotables entrañas misteriosas.”
(P. Henríquez Ureña)

Apóstrofe: consiste en dirigir la palabra con vehemencia a personas, a seres imaginarios o a objetos inanimados.

“Para y óyeme, ¡oh Sol!, yo te saludo...”
(J. de Espronceda)

"Señor, ¿y estas interrogantes rotas
temblando / en mis labios?”
(V. Amaro)

Asíndeton: consiste en presentar una secuencia de palabras, sintagmas o frases separadas por pausas en el habla o por comas en la escritura, es decir sin conjunciones.

“Vine, vi, vencí.”
(C. J. César)

“Que tú eres tú, la humana primavera,
la tierra, el aire, el agua, el fuego, ¡todo!”
(J. R. Jiménez)

Calambur: consiste en lograr un efecto de homofonía mediante la combinación de ciertas palabras que comparten un mismo grupo de sílabas, de tal manera que cada combinación genera su propio significado.

“Con dados hacen condados”
(L. de Góngora)

“Y mi voz que madura
y mi voz quemadura
y mi bosque madura…”
(X. Villaurrutia)

Concatenación: consiste en encadenar vocablos o sintagmas de varias frases de tal modo que el final de una es comienzo de otra.

“Mal te perdonarán a ti las horas,
las horas que limando están los días,
los días que royendo están los años.”
(L. de Góngora)

“El aire era una piel cruzada por mil cuchillos de niebla.
La niebla mordía las espaldas del cielo.
El cielo se pegaba al codo de mis lágrimas.
Mis lágrimas caían como las plumas de un pájaro.
Un pájaro metido en una botella
la botella en un grano de arena
la arena cantando mi canción siniestra
en la más alta prestidigitación del azar.”
(J. A. Peña)

Deprecación: consiste en dirigir un ruego, una petición o súplica ferviente a alguien.

“Ven a decirme a solas
si mi recuerdo acompañó tu viaje
cuando cruzabas las movibles olas”
(S. Ureña)

“Misericordia de mí, Señor,
Si a juzgarme vienes”
(L. de Vega)

Elipsis: consiste en omitir una o más palabras en una frase sin alterar su sentido, puesto que se supone o sobrentiende.

“Yo, asistiendo a mi nacimiento. Yo, a mi muerte.”
(A. Pizarnik)

“…quieres ser astro y relumbras
imagen y dibujas lo plástico del alma
arena y te disuelves en mis dedos…”
(M. A. Jiménez)

Enumeración: consiste en acumular una serie de rasgos, elementos o ideas variadas, o distintas partes de un concepto o pensamiento general.

“Tenía una cámara llena de alambiques, de redomillas, de vidrio, de estaño...”
(F. de Rojas)

“desmayarse, atreverse, estar furioso,
áspero, tierno, liberal, esquivo,
alentado, mortal, difunto, vivo, inmortal..."
(L. de Vega)

Epanadiplosis: consiste en repetir, al principio y final de una frase, o de dos frases consecutivas, la misma palabra:

“Ricos de fortaleza y de fe ricos”
(L. Góngora)

“Verde que te quiero verde.”
(F. García Lorca)

Epíteto: consiste en un adjetivo que destaca una cualidad inherente o peculiar de la realidad a que se refiere el sustantivo.

“Los invisibles átomos del aire”
(G. A. Bécquer)

“y en mí de ti la tibia y roja sangre enamorada”
(O. Muñoz)

Eufemismo: consiste en referirse a una realidad lamentable mediante una expresión de tono suave o agradable, en vez de hacerlo con palabras ofensivas, crudas o vulgares.

Es un genuino amante de lo ajeno: Ladrón

Movimiento táctico hacia la retaguardia: Retirada

Interrupción voluntaria del embarazo: Aborto

Exclamación: consiste en expresar enfáticamente una emoción.

“Ay de mí, ay de nosotros, bienamada…”

“¡Ah los vasos del pecho! ¡Ah los ojos de ausencia!”
(P. Neruda)

Execración: consiste en desear que un mal recaiga sobre quien habla.

“Si eso sabía vuestra merced, replicó Sancho, mal haya yo y toda mi parentela.”
(M. de Cervantes)

“Si he de vivir sin ti, que sea duro y cruento,
la sopa fría, los zapatos rotos, o que en mitad de la opulencia
se alce la rama seca de la tos, ladrándome
tu nombre deformado, las vocales de la espuma, y en los dedos
se me peguen las sábanas, y nada me dé paz.”
(J. Cortázar)

Hipérbaton: consiste en alterar el orden regular o más usual de los componentes básicos de la sintaxis: sujeto + verbo + complemento.

“ebrio al besar tu boca el vino sueña”
(M. A. Jiménez)

“Del salón en el ángulo oscuro,
de su dueña tal vez olvidada,
silenciosa y cubierta de polvo,
veíase el arpa.”
(G. A. Bécquer)

Hipérbole: consiste en exagerar las dimensiones de la realidad nombrada.

“Tanto dolor se agrupa en mi costado
que, por doler, me duele hasta el aliento.”
(M. Hernández)

«Yace en esta losa dura / una mujer tan delgada
que en la vaina de una espada, / se trajo a la sepultura...»
(B. de Alcázar)

Imagen: consiste en representar vívidamente o con plasticidad una intuición o visión poética por medio de la expresión lingüística. Las imágenes se vinculan con las percepciones sensoriales y por ello se clasifican en: visuales, auditivas, olfativas, táctiles y gustativas.

“Más arriba del cielo que ven los hombres había otro cielo; su piso era de nubes, y después, por encima y por los lados, todo era luz, una luz resplandeciente que se perdía en lo infinito. Allí vivía el Señor Dios.”
(J. Bosch)

“La nostalgia transformaba en tibios aromas de flores el olor de fango y mariscos podridos de los canales.”
(G. García Márquez)

Imprecación: consiste en desear que un mal recaiga sobre una persona determinada.

“Ojalá pase algo que te borre de pronto
una luz cegadora, un disparo de nieve…”
(S. Rodríguez)

“Malditos sean los tontos con medallas,
los hijos de mamita, los chivatos,
los candidatos (cierra la muralla),
la letra pequeñita del contrato…”
(J. Sabina)

Interrogación retórica: consiste en plantear una pregunta con la finalidad de reparar en algo, sin esperar respuesta del receptor.

“¿Y esos duendecillos bailando en mis espalda?”
(V. Amaro)

"¿Quién no escribe una carta?
¿Quién no habla de un asunto muy importante,
muriendo de costumbre y llorando de oído?"
(C. Vallejo)

Ironía: consiste en sugerir lo contrario de lo que se expresa, en tono de broma o de burla.

“Comieron una comida eterna, sin principio ni fin…”
(F. de Quevedo)

“Corre, dijo la tortuga,
atrévete, dijo el cobarde,
estoy de vuelta, dijo un tipo
que nunca fue a ninguna parte…”
(J. Sabina)

Metáfora: consiste en identificar una realidad objetiva con otra subjetiva, dada la analogía existente entre ambas.

“Nuestras vidas son los ríos
que van a dar en la mar / que es el morir”
(J. Manrique)

“besa la flor nocturna que para la miel de tus labios
se abre bajo la media luna de mi vientre”
(R. Hilario Medina)

Metonimia: consiste en designar una cosa con el nombre de otra con la que guarda relación de: la causa por el efecto, el continente por el contenido...

“Se leyó enterito a Don Marcial Lafuente”
(J. M. Serrat se refiere a las novelas de ese escritor)

Con la lesión del jugador el equipo perdió a su mejor bate
(un cronista refiriéndose a un bateador lesionado)

Onomatopeya: consiste en imitar sonidos mediante la fonética de la lengua.
"¡Oh ruedas, oh engranajes, r-r-r-r-r-r-r eterno!
(F. Pessoa)

“Que las horas se desplazan
monótonas
danzando con tictac irremediable”
(O. Muñoz)

Oxímoron: consiste en combinar dos palabras con significados opuestos o contradictorios.

“Este amoroso tormento”
(J. I. de la Cruz)

“En la figura que se llama oxímoron, se aplica a una palabra un epíteto que parece contradecirla; así los gnósticos hablaron de luz oscura, los alquimistas, de un sol negro”.
(J. L. Borges)

Paradoja: consiste conciliar dos ideas opuestas, en sentido aparentemente ilógico.

”Es hielo abrasador, es fuego helado,
es herida que duele y no se siente...”
(F. de Quevedo)

“Vivo sin vivir en mí
y tan alta vida espero,
que muero porque no muero.”
(Santa Teresa)

Paralelismo: consiste en la simetría o semejanza sintáctica entre dos estructuras lingüísticas continuas o paralelas.

“A las flores de un día
que no duraban,
que no dolían,
que te besaban,
que se perdían.”
(J. Sabina)

“Yo escribí sus nombres sobre los muros…
Yo rescaté su corazón de la carcoma…”
(F. Gatón Arce)

Paronomasia: consiste en emplear parónimos o palabras con sonidos semejantes pero significados diferentes.

“Cantan los cocolos bajo los cocales”
(M. del Cabral)

"Húmedas llamas
los labios que con tus dedos
delicadamente delatas, dilatas para mí"
(L. E. Aute)

Perífrasis: consiste en expresar con rodeo o abundancia de palabras lo que pudiera expresarse con una.

“Y cuando llegue el día del último viaje,
y esté al partir la nave que nunca ha de tornar…”
(A. Machado, refiriéndose a la muerte)

"La del río, ¡qué blanda!
Pero qué dura es ésta:
la que cae de los párpados
es un agua que piensa."
(M. del Cabral, refiriéndose a una lágrima)

Pleonasmo: consiste en el empleo redundante de palabras.

“Que me bese con besos de su boca”
(Cantar de los Cantares)

“Temprano madrugó la madrugada”
(M. Hernández)

Polisíndeton: consiste en repetir reiterativamente una misma conjunción entre varias palabras, sintagmas o frases.

“y tierra bajo los árboles y tierra
bajo los ríos y en la falda del monte
al pie de la colina y detrás del horizonte”
(Pedro Mir)

“La muerte no se parece a nada
ni a la lluvia ni al eco de las olas
ni a los dinosaurios ni a las mariposas iridiscentes
ni a los prestidigitadores del verano
ni a los vendedores de latas de sardina
ni a las mujeres vulgares o sutiles.”
(J. A. Peña)

Prosopopeya: se trata de una personificación, pues consiste en atribuir a objetos inanimados acciones propias de seres animados o humanos.

“crece el día pequeño en la flor de la vida
y baila la luna en el cráneo del tiempo”
(M. A. Jiménez)

“y la democracia no puede crecer
si la corrupción juega ajedrez”
(J. L. Guerra)

Reduplicación: consiste en la repetición más o menos exacta de una palabra o de algunas unidades de ésta en una frase o verso.

“Ella, ella ya me olvidó.
Yo, yo la recuerdo ahora.”
(L. Fabio)

“Triste, triste; ¿y no es acaso la suprema alegría
de los seres mudables el ser tristes?
(D. Moreno Jimenes)

Retruécano: consiste en repetir en orden invertido los elementos de una frase para expresar una contraposición.

“El secreto de la felicidad no está en hacer siempre lo que se quiere, sino en querer siempre lo que se hace.”
(L. Tolstoi)

“…siempre me causa más contento
poner riquezas en mi pensamiento
que no mi pensamiento en las riquezas”
(J. I. de la Cruz)

Sarcasmo: consiste en emplear una burla sangrienta, una especie de ironía mordaz y cruel con que se ofende o maltrata a alguien o algo.

“Ha salvado a otros y no puede salvarse a sí mismo. ¡El mesías, el rey de Israel! Que baje ahora de la cruz, para que veamos y creamos…”
(Marcos, 15:29)

"Al llegar a media mañana a su oficina, el jefe encuentra a su secretaria pintándose las uñas y de inmediato le dice: ¡Así me gusta, señorita: siempre tan ocupada, trabajando duro por la empresa!"
(O. Muñoz)

Símil: consiste en comparar dos objetos, dadas las semejanzas o afinidades entre ellos.

“Como el toro he nacido para el luto / y el dolor...”
(M. Hernández)

“Ahora tengo el anillo cerrado de su nombre
como una gran cadena sobre mi corazón.”
(F. Mieses Burgos)

Sinécdoque: consiste en designar un todo entero por una de sus partes, la materia por el objeto, el género por la especie… o viceversa, siempre que ambos elementos se relacionen por inclusión y no, como ocurre con la metonimia, por contigüidad.

“En el verde de los pinos
se iban abriendo las alas.”
(J. R. Jiménez refiriéndose a las aves)

“Siento viajar tus ojos y es distante el otoño”
(P. Neruda refiriéndose a una mujer)

Sinestesia: consiste en atribuir a un sentido sensaciones que se perciben a través de otro sentido, sugiriendo que se puede llegar a oír colores, ver sonidos o asignar un sabor a una determinada textura.

“Es de oro el silencio. La tarde es de cristales.”
(J. R. Jiménez)

“y evocar la dulce luz del beso en la penumbra,
la suave melodía de tu piel entre mis brazos”
(O. Muñoz)

No hay comentarios:

Publicar un comentario